Gracias, Señor, por no ignorar mis súplicas y por permitirme confiar en ti completamente. Gracias por permitirme relajarme y dejar que tomes tu lugar como Dios.
Echa tus preocupaciones sobre el Señor y él te sostendrá; nunca permitirá que los justos sean sacudidos.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment