Gracias, Jesús, por amarme lo suficiente como para guiarme, incluso cuando seguirte me cuesta todo. Estoy para siempre contigo.
De la misma manera, aquellos de ustedes que no renuncian a todo lo que tienen no pueden ser mis discípulos.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment