No es gratitud, sino más bien las palabras de un himno cristiano egipcio que dice: "No soy para mí mismo y mis deseos, en mi vida soy Tuyo, oh Señor, quiero decir que soy Tuyo."
Si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así que, ya sea que vivamos o muramos, pertenecemos al Señor.
Comentarios (3)
Join the conversation
Sign In to Comment