Necesito ayuda, estos últimos días me siento como nada. Estos últimos 4 días no he hablado con Jesús ni con Dios. Sé que tengo el corazón endurecido, pero ¿por qué de repente sucede esto? Estaba hablando con Jesús, cometí algunos errores, pero el viernes todo se vino abajo, dejé de hablar con él, ni siquiera quería hablar con nuestro padre. Al día siguiente cometí lujuria y no me importó. He estado tratando de cambiar esto, pero es como si me hubiera rendido, pero aún así pedí perdón. Ahora han pasado 4 días, voy a intentar hablar con Jesús un poco y necesito consejos sobre lo que está pasando. ¿Se ha endurecido tanto el corazón que Dios ya no está aquí?