Señor celestial, te ruego que me protejas del mal y me libres de la lujuria y la tentación. Te agradezco por darme nutrición y agua para seguir adelante. Te pido que me perdones por mis pecados y mis ofensas, así como yo perdonaré a aquellos que me ofenden. Te alabaré y amaré por siempre. Amén.
Ninguna tentación te ha sobrevenido excepto la que es común a la humanidad. Y Dios es fiel; no permitirá que seas tentado más allá de lo que puedas soportar. Pero cuando seas tentado, también te proporcionará una salida para que puedas soportarlo.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment