Querido Dios, por favor dale a mi jefe la perspicacia para entenderme y aceptar que tengo miedo de sentarme con él en el coche a 180 km/h y más. Para que no sea un problema con mi período de prueba.
Si alguno de ustedes carece de sabiduría, debe pedirle a Dios, quien da generosamente a todos sin encontrar falta, y se le dará.
Comentarios (2)
Join the conversation
Sign In to Comment