Querido Padre Celestial, gracias por el don de nacer de nuevo a través de la fe en Tu Hijo, Jesucristo. Te pido Tu ayuda para buscar la renovación espiritual cada día, permitiendo que Tu Espíritu transforme mi corazón y mente. Ayúdame a vivir mi identidad como Tu hijo, reflejando Tu amor y carácter en todas mis interacciones. Dame el valor para compartir el mensaje de salvación con otros y para cultivar la percepción espiritual mientras estudio Tu Palabra. Cuando enfrente desafíos, recuérdame que siempre puedo comenzar de nuevo en Ti. En el nombre de Jesús, oro, Amén.
Por lo tanto, si alguien está en Cristo, ha llegado la nueva creación: ¡Lo viejo ha pasado, lo nuevo está aquí!
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