Odio cómo soy, aunque soy creyente en Jesucristo. Cometo los mismos pecados y me encuentro en los mismos ciclos. Odio cómo es mi vida ahora y cómo me siento impotente para cambiarla. No sé qué me pasa, pero quiero tener la esperanza en Dios de que estoy cambiando y no seguiré igual. Por favor, oren para que mi mente cambie radicalmente para pensar de manera más positiva y tener más propósito en la vida.
No se conformen a los patrones de este mundo, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar y aprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.
Comentarios (2)
Join the conversation
Sign In to Comment