Querido Señor, al entrar en este domingo, te pido que tu paz inunde mi alma. Calma mis ansiedades y miedos mientras me preparo para la semana que viene. Dame fuerza y valor para enfrentar los desafíos, y ayúdame a ser un faro de amor y bondad para los que me rodean.
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment