Estaría inmensamente agradecido por cada oración por mí, para que siempre pueda ser yo mismo, siempre una persona alegre y amable a la que uno pueda acudir en busca de ayuda, y que nadie me quite esta amabilidad. Amén
Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y dominio propio. Contra tales cosas no hay ley.
Comentarios (1)
Join the conversation
Sign In to Comment