Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Y perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal por Cristo Jesús nuestro Señor. Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria, por siempre. Amén.
Y mi Dios suplirá todas sus necesidades conforme a las riquezas de su gloria en Cristo Jesús.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment