¡Buenos días a todos! El Señor cuida de nosotros, sin importar las circunstancias. Él siempre estará allí. Miremos hacia arriba con la certeza de que estamos siendo escuchados y atendidos, en el momento adecuado y en el tiempo correcto. Por cada lágrima tuya, ÉL la secó. Por cada soledad tuya, ÉL fue testigo. Por cada miedo tuyo, ÉL sostuvo tu mano, dándote valor y aumentando tu fe en ÉL. Así que, no temas nada, no importa cuán implacables puedan parecer los desafíos a tus ojos, pero para el Dueño del mundo, son pruebas para que tus hijos estén equipados para enfrentar las adversidades de sus propias elecciones. AMÉN
Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi mano derecha justa.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment