Quiero agradecer al Señor por siempre estar ahí para mí en mi momento de necesidad, por siempre protegerme a mí y a mi familia, y por todo lo demás que hace. Dios es bueno todo el tiempo y no nos pondrá nada que no podamos soportar. Amén.
Dios es nuestro refugio y fortaleza, una ayuda siempre presente en los problemas.
Comentarios (1)
Join the conversation
Sign In to Comment