¡Estoy tan agradecido con Dios! Mi hermana no me había hablado realmente durante 35 años. Me toleraba cuando estábamos en cosas como funerales, pero tenía amargura en su corazón. Hace 3 meses, otra hermana me dijo que la primera hermana le pidió mi número de teléfono. La primera hermana se puso en contacto conmigo hace 2 meses. Dios ha suavizado su corazón. Estamos reconstruyendo nuestra relación. Nos queda un camino por recorrer, pero estamos en camino. Gracias Dios.
Sean amables y compasivos unos con otros, perdonándose mutuamente, así como en Cristo Dios los perdonó a ustedes.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment